PRANCE metalwork es un fabricante líder de sistemas metálicos para techos y fachadas.
El aluminio se comporta de forma predecible ante el estrés térmico, pero el rendimiento de la fachada depende de los detalles y los materiales. La dilatación térmica se compensa mediante juntas deslizantes diseñadas, anclajes flexibles y juntas de estanqueidad; sin estos, las fluctuaciones de temperatura —el intenso calor diurno en las ciudades del Golfo Pérsico y los fríos inviernos de Asia Central— pueden provocar fatiga del sellador, tensiones en el vidrio y deformación del marco. Las roturas de puente térmico en las extrusiones de aluminio reducen la transferencia de calor por conducción y ayudan a evitar la condensación interna. La exposición a los rayos UV afecta a los acabados superficiales y a los selladores; los recubrimientos de PVDF de alta calidad y el anodizado resisten el caleo, la decoloración y la degradación inducidos por los rayos UV. Los selladores y las juntas de estanqueidad deben especificarse teniendo en cuenta su resistencia a los rayos UV y ajustarse a los rangos de temperatura previstos para evitar el endurecimiento o el ablandamiento prematuros. El acristalamiento aislante con recubrimientos de baja emisividad mantiene su rendimiento a lo largo de los ciclos, mientras que el vidrio laminado minimiza el riesgo de proyección de fragmentos si el estrés térmico provoca la rotura. En resumen, con una selección adecuada de materiales —marcos con rotura de puente térmico, acabados resistentes a los rayos UV y detalles de movimiento flexibles— los muros cortina de aluminio soportan de forma fiable las temperaturas extremas y la exposición a los rayos UV que se encuentran en Oriente Medio y en muchas partes de Asia Central.