El costo de un sistema de fachada de vidrio comprende materiales, fabricación, servicios de ingeniería, logística, mano de obra de instalación, equipo de obra y consideraciones de mantenimiento a largo plazo. Los materiales incluyen tipos de vidrio (Low-E, laminado, templado, aislante, resistente al fuego) y sistemas de aluminio con tratamientos superficiales como PVDF o anodizado. La fabricación implica el corte del vidrio, el templado, la laminación, el montaje de la unidad de vidrio aislante (IGU), el pulido de los bordes y el procesamiento especializado. Los costos de ingeniería incluyen análisis estructural, planos de taller, cálculos térmicos y pruebas de maquetas. El costo de la mano de obra de instalación varía según la altura del edificio, el área de la fachada, la accesibilidad y las tarifas locales de mano de obra. La instalación de fachadas de gran altura puede requerir grúas, elevadores de mástiles, góndolas o dispositivos de elevación especiales. Los selladores, juntas, soportes, anclajes y materiales impermeabilizantes también contribuyen al costo total. Los contratistas deben considerar la logística como el embalaje, el transporte y el almacenamiento en obra. Los costos a largo plazo incluyen la limpieza, el reemplazo de juntas, el mantenimiento del sellador y la posible remodelación. Si bien la inversión inicial puede ser significativa, una fachada de vidrio de alto rendimiento a menudo reduce los costos operativos a través de una mejor eficiencia energética.