PRANCE metalwork es un fabricante líder de sistemas metálicos para techos y fachadas.
Los colapsos de techo de metal generalmente se originan a partir de deficiencias estructurales o errores de instalación que comprometen la capacidad de carga del sistema de suspensión. Exceder las cargas de diseño agregando accesorios pesados o aislamiento sin recalcular las especificaciones de alambre de percha puede producir fuerzas estáticas excesivas. Anclaje inadecuado, como el uso de sujetadores no clasificados para el peso del techo o la condición del sustrato, se lleva a fallas de extracción en los puntos de conexión. En entornos corrosivos, especialmente cerca de zonas costeras o industriales, los componentes de suspensión sin protección pueden oxidarse, debilitando su resistencia a la tracción con el tiempo. Los eventos sísmicos imponen cargas dinámicas que los conjuntos ordinarios de clip y alambre pueden no acomodar a menos que se diseñen especialmente con clips sísmicos flexibles y refuerzos. La infiltración de humedad a través de las fugas del techo o la condensación de HVAC pueden degradar tanto los paneles y las perchas del techo, lo que resulta en un desprendimiento inesperado. Finalmente, la mala coordinación con los intercambios, por ejemplo, cortar cables de suspensión a longitudes incorrectas o descuidar las pautas del fabricante para los puntos de empalme, aumenta mucho el riesgo de colapso. Revisión de ingeniería rigurosa, cumplimiento de los estándares de instalación e inspecciones regulares son esenciales para evitar estas fallas estructurales en los sistemas de techo metálico.